sábado, septiembre 10, 2011

Así se ve desde aquí...

Yo he conocido a muchos hombres sin identidad, algunos la perdieron de niños en medio de las confusiones que sus padres les crearon, otros, creyeron no les haría falta, unos, los pocos la cubren con prejuicios y patrones impuestos por mamá y la abuela persignada, y qué tal si le agregamos el miedo a que los azotarán si la mostraban; otros más, la dejaron olvidada en un baño público, pasa más seguido de lo que crees, pero hay quienes simplemente decieron no usarla, no perfeccionarla, dejarla de lado o guardarla bajo la combinación del "no la desarrollo".

Esas personas determinan en un momento de su existencia que si la necesitan o les "cae el veinte" como más comunmente decimos, entonces vienen y comienzan una batalla por recuperarla, los más, fingen una identidad ficticia, más bien diseñada no por la vivencia ni experiencia, sino, por las letras y trazos de la necesidad de ser aceptados y la conveniencia (cabe mencionar que ser convenenciero no es malo, por ejemplo: comemos porque es conveniente, trabajamos porque es conveniente, mantenemos relaciones humanas porque es conveniente... bueno, esa creencia me dicta mi propia identidad), los menos, adoptan un papel de "víctima" que para los menos de esos menos, funciona. Es increíble lo que una persona sin identidad es capaz de llegar a realizar por "un lugar en la sociedad"; otros, sin identidad, copian y magnifican lo bueno que recogen de otros modelos de personas, creyendo que podrían recibir los mismos beneficios, lo que no saben es que "esas personas" son originales, auténticas, formadas desde el comienzo y sin retrasos en el tiempo; así pues, cuando esa copia de identidad cansa y no da lo que se esperaba va a la basura y a buscar una más digamos... impactante para el público.

Hoy en día la gran ola de la  falta de identidad pura y original, se ve reflejada directamente en nuestra sociedad mexicana;  por siempre los jóvenes han copiado figuras que gozan de cierta fama, figuras de fuerza y de autoridad, sólo que a la fecha no importa que sean del bando de los malos, así, ahora jugar a policías y ladrones es más bien aburrido si no eres de los ladrones...

Como un péndulo, los patrones regresarán de donde partieron, esforcémonos por ponerle fuerza y rapidez al proceso... búsquemos nuestra propia idendidad retrocediendo en nuestros pasos y no en los de los demás...


Ya se ha dicho muchas veces, pero así, lo digo yo, ojalá te entretengas, ójala te sirva...

1 comentario:

Unknown dijo...

y se me viene a la mente como cancionero, esa del rockdrigo gonzalez, rancho electronico, "en la vulgar falta de identidad"